Perros de Tíndalos: Que bonito mi perrito

 

El perro, el mejor amigo del hombre y uno de las mejores mascotas que una persona puede tener, es una mascota que ha pasado cientos de años en la humanidad y que siempre nos ha acompañado, pero que pasa cuando hay perros en la mitología de Lovecraft, hoy hablaremos de los perros o sabuesos de Tíndalos.

 

Los perros o sabuesos de Tíndalos son unos seres extra dimensionales que aparecen en el relato de Frank Belknap Long. Como una vaga descripción dicen lo siguiente: "...En sus cuerpos flacos y famélicos se concentra todo el Mal del universo. En realidad, no estoy seguro de que tuvieran cuerpo: sólo los vi un instante."

-Frank Belknap Long

 

Como nos damos cuenta, no se ha dado ninguna descripción exacta de como son estos perros, pero en el capitulo 3 del relato, se menciona como uno de estos perros deja destrozado el cadáver de un ser humano, en este caso, el de Halpin Chalmers, después de que este fuera cazado por una horda de estas bestias.

 

"Chalmers yacía boca arriba en el centro de la habitación. Estaba completamente desnudo y tenía el pecho y los brazos cubiertos de una especie de gelatina azulada. La cabeza, totalmente separada del tronco, reposaba sobre el pecho y sus facciones aparecían horriblemente retorcidas y mutiladas. No había ni rastro de sangre.”

-Frank Belknap Long

 

Estos perros fueron creados cuando la diosa K'thun logro conseguir la piel del dios Noth-Yidik para así crear una nueva especie. Como esta especie viene del ADN de un dios, se puede mencionar que los perros de Tíndalos tienen una naturaleza casi de dios y eso hace que tengan unos poderosos y terroríficos poderes.

 

También se dice que estos representan todo lo impuro que existe y porque la pureza es algo que es casi imposible que puedan alcanzar, estos odian y quieren destruir o corromper todo lo que es puro. Esta naturaleza hace que se vinculen con las formas angulares, pues estas no tienen la pureza que tienen las formas curvas.

 

Estos perros viven en la era de la tierra donde los seres vivos eran únicamente unicelulares y les da la capacidad de viajar entre dimensiones y los tejidos para así perseguir y acabar con sus próximas víctimas. Es casi imposible toparse con uno, a menos que se ingiera la “Droga de Liao” que permite viajar en el tiempo y acercarse peligrosamente a ellos.